UC - Críticas
| País: Suecia. Año: 2012. Duración: 122 min. Género: Thriller.
Dirección: Lasse Hallström. Guion: Paolo Vacirca; basado en la novela de Lars Kepler. Producción: Börje Björnbom, Börje Hansson, Bertil Ohlsson y Peter Possne. Música: Oscar Fogelström. Fotografía: Mattias Montero. Montaje: Sebastian Amundsen y Thomas Täng. Dirección artística: Lasse Westfelt. Vestuario: Karin Sundvall. Distribuidora: eOne Films Spain.
Estreno en España: 12 Julio 2013. |
Interpretación: Mikael Persbrandt (Erik Maria Bark), Tobias Zilliacus (Joona Linna), Lena Olin (Simone Bark), Helena af Sandeberg (Daniella), Oscar Pettersson (Benjamin), Anna Azcarate (Lydia), Jonatan Bökman (Josef). |
EN BUSCA DEL ASESINO (¡QUÉ ORIGINAL!)
“El Hipnotista" es un decepcionante y rutinario thriller que nos conocemos de memoria desde el principio porque lo hemos visto mil veces antes y además en muchas ocasiones explicado de forma más brillante. Sorprende que un director como el sueco Lasse Hallström, con un inicio de carrera tan prometedor y prestigioso, nos esté ofreciendo unas últimas obras tan mediocres y obvias, como si hubiera perdido toda pasión cinematográfica y su oficio como cineasta se hubiera convertido en un simple medio para llenar la cartera.
SINOPSIS: El salvaje asesinato de una familia en su casa de Estocolmo inicia una investigación policial. La falta de pistas provoca que el comisario judicial Joona Linna solicite la ayuda de un afamado hipnotizador, Erik Maria Bark, para interrogar al único superviviente, un chico de 15 años, e intentar averiguar el paradero de su hermana desaparecida. La investigación toma un giro inesperado cuando el hijo de Bark es secuestrado. Joona y Erik Maria tendrán que trabajar juntos para resolver ambos misterios.
“El Hipnotista” nunca encuentra el ritmo adecuado para el género y su cadencia pertenece más al drama que a la intriga, perdiéndose el interés paulatinamente y apoderándose del espectador el mismo sopor que se siente cuando uno se encuentra frente al televisor con un telefilm de sobremesa, le empieza a entrar la morriña y le apetece más pegarse una buena siesta que seguir mirando algo que carece de interés. Pero hay que recordar que no nos encontramos ante un telefilm, sino a una pieza cinematográfica de mayor presupuesto y al que el apellido de su director lo llevó incluso a estar en la Sección Oficial de Festivales de calidad como el de San Sebastián.
Francamente, después de ver las dos últimas obras de Hallström, “El Hipnotista” y “Un Lugar Donde Refugiarse (Safe Haven)” (tampoco la antepenúltima era para tirar cohetes, “La Pesca de Salmón en Yemen”), creemos que el director debería tomarse un descanso que le permitiera replantearse su carrera para volver a sus interesantes orígenes, porque su trabajo actual no tiene chispa ni un ápice de originalidad. “El Hipnotista” es una cinta de suspense que ni emociona ni intriga, de factura técnica correcta pero gélida, con interpretaciones funcionales pero con personajes desdibujados. Poco se puede destacar de un film donde gobierna la desidia, una lástima.
